En el plano de la salud privada, el valle de Calamuchita retrocedió medio siglo: ya no se atienden cirugías ni partos en ningún centro privado, como ocurría décadas atrás. De a una, fueron cerrando las clínicas que prestaban internación y practicaban cirugías en la zona.Villa General Belgrano y Santa Rosa llegaron a tener dos cada una; Embalse y Villa del Dique también tuvieron su clínica con prestaciones de mayor complejidad. Ya no queda ninguna: en las distintas localidades sólo se sostienen establecimientos de atención primaria y consultorios externos. Se trata, paradójicamente, de una de las regiones de mayor crecimiento en la provincia en las dos últimas décadas, de la mano del desarrollo turístico.
Las opciones en el plano privado más cercanas son
Alta Gracia, Río Tercero y Córdoba.
"Si las obras sociales pagan mejor, los beneficiarios van a recibir mejor atención, lo que es positivo, pero al menos en esta zona ya no repercutirá porque no queda ninguna clínica de atención con cierta complejidad", precisó el médico Mario Panero, director del hospital provincial Eva Perón, de Santa Rosa de Calamuchita. En un establecimiento privado de Villa General Belgrano asisten a los pacientes de Pami ambulatorios, pero cuando requiere otro nivel de atención, deben derivarlas a Alta Gracia.
El deterioro de las opciones privadas, de hecho, repercutió en la mayor demanda que recibe año a año el hospital de Santa Rosa, que asiste también a los jubilados que optan por atenderse allí antes que viajar a ciudades alejadas con clínicas que les brinden cobertura médica.
